Interesante Artículo

Estimados estudiantes, subo a nuestra pagina un artículo del Arq. Ocampo, espero le den una leida y comenten al respecto. Se tomara en cuenta los comentarios.

Arq. José R. Ocampo Castrillo

Cada institución maneja de memoria sus asuntos, sin efectuar un estudio e investigación seria. El año pasado, el Gobierno municipal de La Paz publicó una cartilla con el título de CATASTRO, “Documento de apoyo para los Municipios de Bolivia”. Es un resumen del Reglamento Nacional de Catastro Urbano, aprobado mediante Decreto Supremo el año 1991 y éste, a su vez, es otro resumen del “Manual de Avalúos Predios Urbanos”, dejado por la Consultora norteamericana J.L. Jacobs & Co. el año 1968, después de haber ejecutado la Recatastración Urbana de la Ciudad de La Paz.
Tanto el Manual como el Reglamento no han tenido una aplicación práctica por la siguiente razón: el sistema vigente en el país es norteamericano; Catastro Fiscal (catastro = impuesto). La base de su aplicación es el patrimonio del ciudadano o sea el valor determinado en el documento de adquisición del inmueble. Durante el trabajo, los consultores se sorprendieron de que en La Paz normalmente registraban un valor inferior al de la transacción, a fin de evadir el impuesto. Para salvar la situación y cumplir con el trabajo, elaboraron el Manual ya mencionado. El objetivo principal era el de establecer un valor inmobiliario de mercado, improvisando una estructura de cálculo muy subjetiva, con factores sin base matemática, que dio lugar a muchas irregularidades que se mantienen hasta ahora.
El Reglamento Nacional de Catastro Urbano (1991), que nace después de la Ley de Reforma Tributaria (1986) y antes de la Ley de Participación Popular (1994), es un resumen del Manual de Avalúos que trata de introducir alguna base de datos de catastro urbano, no llega a ser ni fiscal ni urbano, quedando sin aplicación práctica.
La cartilla publicada por el Gobierno Municipal de La Paz (2009) resume el Reglamento, sin constituir un documento de apoyo para los municipios.
El Viceministerio de Vivienda y Urbanismo prepara un Proyecto de Ley de Regulación de la Propiedad Urbana y el Derecho Propietario sobre Inmuebles Urbanos. Una vez más el Gobierno nacional tiene la intención de regular el tema de la propiedad urbana a través de una ley. La iniciativa es loable porque por fin se podrá implementar el Catastro Urbano, base fundamental para el éxito de la administración edilicia.
La debilidad radica en no contar con recursos humanos debidamente capacitados. Existen 337 Gobiernos Municipales que se harán cargo de la implementación de la ley, por lo que de inmediato se debería dar capacitación en Catastro Urbano en coordinación con los Municipios, Facultades de Arquitectura y colegios profesionales.
Se debe migrar del sistema actual de catastro fiscal al de catastro urbano, registrar el inmueble, no a la persona, espíritu de la ley que se proyecta. Además debe adecuarse al “Reglamento, Modificación y Actualización de la Ley de Inscripción de Derechos Reales”, por Decreto Supremo Nº 27.957 de 24/12/04, por el que ya no se registra a la persona sino al inmueble, adecuarse a los artículos No. 6 (Requisitos de fondo del título) y No. 12 (Sistema y técnica del registro). Las alcaldías no emiten plano catastral porque no tienen catastro urbano, sólo otorgan un certificado de registro catastral a nombre del propietario, con vigencia de cinco años y los problemas legales a su vencimiento.
Se debe ingresar a la Formación del Catastro Urbano con el levantamiento de la información inmobiliaria gráfica y alfa numérica en campo, las vías, terrenos y edificaciones y poseedores o propietarios, para la formación de la base de datos sistematizada. Se debe homologar el código del Folio Real con el catastral con base en el código madre de departamento, provincia, sección y cantón y los códigos legal y catastral, así se logra la seguridad jurídica del derecho propietario.
El Catastro Urbano no es impuesto, es información básica para la planificación, por la cantidad y calidad de información que maneja con una base de datos sistematizada que sirve para establecer los verdaderos valores catastrales. Actualmente las alcaldías pierden el 75% del impuesto a las transferencias por falta de un sistema científico. Los ingresos propios de los municipios llegan a millones y están en la calle, hay que enseñarles a levantarlos.
Por falta del Catastro Urbano, todos los años el contribuyente se encuentra con deudas impagables y el riesgo de perder su inmueble por la mala aplicación de la ley. El Código Tributario no es para inmuebles, por no ser actividad económica que genera utilidades ni mucho menos se tiene registrado el inmueble en un libro de contabilidad. Solamente se debe aplicar a la transferencia porque el vendedor está beneficiándose con un monto imponible.
Debemos dejar de lado el sistema actual e ingresar a la migración con la transcripción de la información existente y necesaria al nuevo sistema a través de una normativa.
Municipio con Catastro Urbano es solvente y sujeto de crédito. Es la única inversión que se recupera en forma inmediata, es altamente rentable y no se necesita inversiones millonarias.